El reflejo del alma....

Hay momentos en la vida en los que todo lo que te rodea parece estar teñido de negro. Te sientes mal contigo mismo, no te quieres, no consigues apreciar nada, sientes que no puedes hundirte ya más. Lo malo es que llegados a este punto, tocas el fondo del abismo y te derrumbas por completo. De pronto ya no tienes ganas de sonreír, ya nada consigue divertirte, en ese momento no consigues distinguir nada que no sea tu propio sufrimiento.

La gente hoy en día menosprecia el valor de un simple te quiero a tiempo, de un abrazo que se necesitaba hace tiempo, de unas palabras cariñosas de esperanza. Las mujeres en su mayoría son traicioneras y retorcidas, y los hombres unos machitos y capullos. Es lo que llamaríamos el valor o el culto a la imagen hacia los demás, nuestras desenfrenadas ganas de quedar bien ante el resto del grupo por los motivos que sean.

¿No es un poco triste?

No es triste que un hombre no exprese sus sentimientos porque tiene que ser el más machito....?
No es doloroso que una mujer traicione a una buena amiga solo para liarse con un idiota....?

Se me ocurren dos historias para describir como los hombres y las mujeres en su mayoría se comportan como cabrones.

La primera es la historia de un chico a la que la novia le dice que ha sido el chico que mejor se ha portado con ella de todos, pero que va a salir con otro que la trata peor. Hay veces que me pregunto que sentido tiene esa maldita vena masoquista que tienen muchas mujeres para buscar a un chico que las trate como el culo pero que por supuesto sea un macizo como no. El cuerpo es importante, pero joder no lo es todo ni muchisimo menos.

La segunda es la de una chica que ha hecho el amor por primera vez con el chico del que llevaba tiempo enamorada, cuando queda con él otro día junto con los amigos de este el la confiesa que solo se acostó con ella por un pique que tenia con un amigo y que en realidad no quería nada serio. Cuantas veces una chica ha sentido algo verdaderamente fuerte por un hombre, tan fuerte como para hacerse daño a si misma para protegerle a el, pero el no puede abrirse a ella, ha de ser un gran hombre y pasar de ella como de la mierda para no parecer un debilucho.

Y por ultimo aunque no lo había planeado al principio esta mi historia.















Soy alguien de lo más corriente, sin ningún tipo de talento ni habilidad especial que en realidad solo busca lo que en el fondo todos deseamos, querer y ser querido. Pero por supuesto como soy un hombre tengo prohibido ser sensible, o llorar cuando me siento destrozado, o quedarme a ayudar a una amiga en vez de ir de boca en boca en una fiesta. Debo comportarme como un capullo si quiero conseguir novia, porque claro la sociedad me lo demanda. No he de apreciar a la chica a la que quiero, no, he de insultarla, gritarla, bacilarla, y entonces y solo entonces sera cuando porfin me haga caso.

Lo más triste de todo es mirar mi reflejo en el espejo y no notar nada, ni sueños, ni esperanzas, ni una meta importante, porque para que luchar? no seria mejor simplemente dejarse llevar por la corriente y ser uno más?. Mirarme en el espejo me provoca nauseas y asco, pero lo prefiero a abrir la ventana y contemplar la sociedad en la que vivo....